• Focalizarse en las competencias críticas en lugar de hacerlo en operaciones rutinarias de sistemas.
• Aumentar el rendimiento mediante la rápida adecuación de sus sistemas a las demandas de comunicaciones de su negocio.
• Reducir los periodos de formación y gastos de personal calificado y con experiencia.
• Conseguir un balance estable de los recursos de la organización, los servicios de outsourcing y las contribuciones de terceras partes.

• Acelerar la evolución a las nuevas tecnologías, se bajan gastos, se mitigan riesgos y se mantiene el control sobre el entorno de innovación tecnológica.
• Máximas garantías de fiabilidad y disponibilidad, y en unas condiciones económicas óptimas para que resulte accesible a cualquier tipo de empresa.

Beneficios

• Permite a la empresa responder con rapidez a los cambios del entorno.
• Construye una larga ventaja competitiva sostenida mediante un cambio de reglas y un mayor alcance de la organización.
• Incrementa el compromiso hacia un tipo específico de tecnología que permite mejorar el tiempo de entrega y la calidad de la información para las decisiones críticas.
• Aumento de la flexibilidad de la organización y disminución de sus costos fijos.